Siete hábitos de jugadores de billar altamente efectivos

Siete hábitos de jugadores de billar altamente efectivos

Hay muchas teorías que creen que los hábitos pueden formarse en periodos de 7 y 21 a 45 días, pero cuando menos lo esperas, sin darte cuenta de que lo estás haciendo, es cuando ya has adquirido un hábito. 

En uno de los libros de autoayuda más vendidos de todos los tiempos, “Los siete hábitos de las personas altamente efectivas” de Stephen R. Covey, se presenta el concepto de cambio de paradigma que prepara a los lectores para un cambio completo de mentalidad. Aplicando estos hábitos similares al juego de billar, no es necesaria una transformación radical para convertirnos en un jugador altamente efectivo. Tal vez descubras que ya has hecho algunas de estas cosas parte del tiempo. La clave es tener hábitos efectivos y hacerlos todo el tiempo, y sin un esfuerzo consciente. Ahí es cuando sabrás que se han convertido en hábitos.

Y después de leer este interesante artículo, no dejes de enterarte de los usos prácticos de los videojuegos en muchas áreas de nuestras vidas.

Hábito 1:

Ser coherente: formar el hábito de formar hábitos. Tu mecánica y la rutina previa al disparo son reacciones habituales en tu cerebro. Cuando dedicas las horas y desarrollas una base de fundamentos  sólidos, estás creando memoria muscular, y esa consistencia es crítica bajo presión. Trabaja en ser consistente con todos tus movimientos en la mesa. No necesitas tener la cantidad exacta de movimientos de calentamiento antes de cada disparo (a menos que sientas que ayuda), pero es importante disparar de manera consistente solo cuando te sientas listo.

Hábito 2:

Siempre ten un plan antes de comenzar a disparar. Visualiza todo el patrón de juego en tu mente. Recuerda jugar la posición de tres bolas a la vez para cada disparo. Está bien cambiar el plan si es necesario. Los jugadores profesionales lo hacen todo el tiempo. Las cosas no siempre funcionan como lo planeaste originalmente, pero sin un plan en absoluto, solo estás dejando las cosas al azar.

 Hábito 3:

La mayoría de los procesos tienen una secuencia, igualmente en el billar. El proceso de disparo debe ser el siguiente: tomar una decisión, comprometerse con la decisión, agacharse y disparar. Si cambias de opinión, entonces debes comenzar el proceso de nuevo.

 Hábito 4:

Piensa positivamente. Desintoxica tu vida de todos los pensamientos negativos, en tus palabras y lenguaje corporal. Asiente cuando estés listo para disparar. Da un paso adelante en el tiro. Di "Puedo" y "Lo haré" en lugar de "No puedo..." Nunca te rindas. Ten confianza en tus acciones. Podrías ser el mejor jugador del torneo, pero nunca ganarás si realmente no crees que puedas.

 Hábito 5:

Mantente siempre aprendiendo. Siempre hay algo que se puedes aprender de cada escenario. Nunca dejes que tu ego se interponga en el camino de aprender algo nuevo. Incluso los peores jugadores podrían enseñarte las lecciones más valiosas. Efren Reyes es posiblemente uno de los mejores jugadores de todos los tiempos. Cuando está entre partidos, a menudo puedes encontrarlo sentado en las gradas, observando y recordando cómo era ser un principiante del juego. Un error por parte de un jugador principiante podría convertirse en tu salvador si  le das la aplicación correcta.

Hábito 6:

Céntrate únicamente en las cosas que puedes controlar: tu respiración, tu selección de disparos, tu ejecución, tu tempo. Estas son todas las cosas que puedes controlar.

 Hábito 7:

Mantente siempre en el partido: esto significa que debes apagar tu teléfono celular, no está enviando mensajes de texto o esperando una llamada.  No pidas una comida en la que estés picando cada vez que te alejes de la mesa o te preocupes por que se enfríe cuando estás en la mesa, y definitivamente no debes estar mirando alrededor mientras estás jugando. Mantente enfocado en las mesas y las bolas. Prepárate para jugar y aprovechar al máximo cada una de las oportunidades que recibes.

Mientras atraviesas el proceso de convertirte en un jugador de billar más efectivo, estos consejos y adopción de hábitos te pueden ayudar a conseguirlo más fácilmente.