10 manías de billaristas

Algunos más y otros menos, pero en general los billaristas somos maniáticos y supersticiosos. Mientras jugamos desplegamos una serie de muletillas o tics que nos hacen sentir más seguros sobre la mesa. Son pequeñas rutinas, simples repeticiones, como las de un tenista cuando dispone del saque o un golfista cuando prepara su swing.

En el artículo de hoy hablamos de las 10 manías que tienen muchos billaristas y, probablemente, también tú.

1. Mover el dedo índice de la mano apoyada sobre el tapete justo antes de tirar

Más que una manía, en realidad es un tic o un acto inconsciente que de vez en cuando se ve en los campeonatos. Hay algunos jugadores que, mientras liman justo antes de tirar, mueven arriba y abajo el dedo índice de la mano del bridge. ¿A qué se debe? Tal vez a los nervios o simplemente porque lo han adoptado como una rutina. Seguramente muchos ni se dan cuenta de que lo hacen.

2. Guardar la tiza en el bolsillo después de usarla

Es una manía muy típica de los jugadores de Snooker. Pongo tiza, me la guardo en el bolsillo y tiro. Pongo tiza, me la guardo en el bolsillo y tiro. Así sucesivamente. En Pool es más habitual aparcarla sobre la mesa, aunque hay quien también la guarda. Una variante sería usar el portatizas magnético o el de cuero.

3. Limar un número concreto de veces (siempre el mismo) antes de tirar

Hay quien siempre lima tres veces antes del tiro, otros cinco y alguno que con dos tiene suficiente. En mi caso siempre hago 1-2, pausa, 1-2 y tiro. Tener una rutina de este tipo bien asimilada te ayuda mucho, pero debes automatizarla para ejecutarla sin pensar.

4. No dejar nunca la tiza en la mesa

Así como hay billaristas que siempre quieren tener la tiza en el bolsillo, los hay que odian dejarla sobre la mesa cuando pierden el turno. Por eso siempre se la llevan en la mano o donde sea, pero nunca la aparcan en las bandas.

5. Montar primero el taco de sacar y luego el de jugar

Otra manía típica de deportistas: el orden de preparación del material con el que compites. Hay billaristas que siempre montan primero el taco de sacar y luego el de jugar, o viceversa. Como el futbolista que siempre se calza primero la bota derecha.

6. Puntear siempre con la misma bola

El punteo suele ser también un foco de manías. Desde puntear siempre desde el mismo lado (por ejemplo, la izquierda), hasta hacerlo usando siempre la misma bola (por ejemplo, el seis). Hay quien también necesita emplear una bola de mayor numeración del contrario. “Si no lo hago así, perderé el punteo”, piensan.

7. Levantarse si vienen pensamientos negativos justo antes de tirar

Lo ideal sería bajar al tiro pensado, pero muchas veces nos enviamos mensajes a nosotros mismos cuando estamos limando: “La voy a fallar, la estoy tirando con demasiado efecto, no sé dónde quedará la blanca, me voy a tapar…”. Cuando aparecen los pensamientos negativos, lo mejor es levantarse y anularlos. Muchos billaristas han desarrollado este hábito muy recomendable.

8. Mirar fijamente la blanca cuando tira el rival

Es un gran recurso para no perder nunca la concentración. Consiste en fijarse en un punto determinado de la mesa, en este caso la bola blanca, y no desprenderse de él hasta que te toca tirar de nuevo.

9. Sentarse cuando es el turno del rival

Si cuando está tirando el rival permanezco de pie y no me siento, no estoy cómodo. Necesito hacer mi rutina en la silla, no de pie. Este es un hábito sano para ambos: el que lo ejecuta está más cómodo, descansa y hace su rutina; y a la vez molesta lo menos posible al rival.

10. Quejarse al fallar

Y llegamos al décimo y último punto de este listado de tics y supersticiones con la manía por excelencia. La que todos hemos experimentado alguna vez: cuando fallamos nos quejamos, de mil maneras distintas. Ya sea por una reacción instintiva, por un sentimiento de fracaso o sorpresa, o por ser débiles mentalmente, hacemos una mueca o mal gesto justo después de errar un tiro. De todas las de esta lista es probablemente la única manía negativa de la que se debería desprender cualquier jugador.

Ahora te toca a ti confesar cuál es tu manía más rara mientras entrenas o compites. Escríbelo abajo en los comentarios del artículo.